Preparación
- En primer lugar, bate los huevos junto con la pizca de sal, luego añade la harina de coco y el polvo de hornear. Puedes optar por dejarlo neutro o agregarle tus especias y sabores favoritos, como orégano u otros condimentos. Mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien integrados.
- La mezcla resultante será bastante densa, así que añade pequeñas cantidades de agua poco a poco hasta obtener una textura cremosa.
- Si lo deseas, puedes agregar semillas de chía, sésamo negro, girasol u otras semillas como decoración. Esta etapa es opcional y depende de tus preferencias personales.
- Vierte la mezcla en una bandeja para hornear antiadherente o en un molde previamente engrasado y enharinado. Si es necesario, puedes cubrir el molde con aceite vegetal para evitar que se pegue.
- Lleva la preparación a horno precalentado a temperatura media, alrededor de 180° C, y hornea durante aproximadamente 25 minutos o hasta que esté dorado y cocido. El tiempo de cocción puede variar según el horno, así que verifica la cocción insertando un palillo en el centro; si sale limpio, estará listo.
- Deja que el pan de coco sin TACC se enfríe durante unos minutos y luego desmóldalo con cuidado.
¡Ahora está listo para disfrutarlo!
CONSEJOS:
Consistencia de la masa: Al agregar agua a la mezcla, hazlo poco a poco hasta obtener una textura cremosa. Esto evitará que la masa quede demasiado líquida o demasiado densa.
Personaliza el sabor: Si bien la receta sugiere orégano u otras especias, siéntete libre de experimentar con diferentes sabores que te gusten. Puedes agregar canela, nuez moscada, o incluso ralladura de limón para darle un toque especial.
Decoración opcional: Las semillas de chía, sésamo negro o girasol no solo agregan un toque decorativo, sino que también aportan nutrientes adicionales. Sin embargo, si prefieres un pan de coco más simple, puedes omitir este paso.
También te sugerimos: Cómo hacer torta de maicena y coco ¡Una exquisitez de sabor!